Querida concuñada
te felicito en este bello día
en el que años atrás has nacido
y mis mejores deseos te envío.
—
Nuestras vidas se han unido
cuando en la familia hemos entrado
y nada hay que me haga más feliz
que celebrar este día en el que has nacido.
—
Muchos sueños tengo para ti
entre ellos que sigas feliz,
que la dicha te acompañe en tus acciones
y que el futuro te regale grandes emociones.
—
Nuestros caminos se han cruzado
y nos han unido en una misma familia,
por eso concuñada querida
te auguro un excelente camino.
—
¡Feliz cumpleaños en tu día!
¡Concuñada mía!
Que nada te falte en tu vida
y tengas toda la dicha.
—
La felicidad ha llamado a mi puerta
cuando has formado parte de la familia,
pues una concuñada como tú
no la encuentras en cualquier vida.
—
Amable y sincera como eres
espero que no cambies nunca,
pues la amistad que nos une
me hace feliz siempre.
—
Ilusión y sueños te deseo
en tu vida por siempre,
pues la felicidad está en ellos,
y la mía con nuestra familia.
—
Concuñada del alma
que no pude haber tenido otra mejor,
así soy feliz de compartir tu vida
con nuestra maravillosa familia.
—
El amor ha llamado a nuestras puertas,
tenemos a nuestras queridas parejas,
una familia maravillosa
y un futuro dichoso,
colmado de sueños.
—
Mejor concuñada que tú
no podía esta familia encontrar,
por eso en este día
con mucho amor te deseo felicitar.
—
Mucha unión siento en esta familia
y contigo una mayor,
pues eres una persona única
y te quiero un montón.
—
Celebro este día tuyo
que te ha visto nacer,
por todo lo alto y con gran orgullo.
Concuñada de mi alma,
que todo lo mejor te mereces.
—
Muchas bendiciones para tu hogar,
para tu marido y para tu familia,
que también es la mía.
¡Felicidades!
—
Estilosa y decidida,
amorosa y cariñosa,
así eres tú
y siempre lo serás.
¡No cambies nunca!
—
Tengo una amiga perfecta,
pues tienes un gran corazón
y una humanidad tremenda.
Mi concuñada es un cielo
pues su alma es muy pura.
—
Nada tienes que esconder,
eres transparente como el agua
y por eso te quiero tanto.
Muchos besos para ti,
concuñada de mi alma,
que todo te mereces y nada pides.
—
Grandes besos de mi parte
y que la gloria esté siempre contigo,
pues te quiero tanto que tengo que decirlo.
¡Felicidades concuñada!
¡Sonríe siempre y sé feliz!