Algunos recuerdos vienen y van
pero el tuyo por siempre quedará,
impreso en mi corazón
y siempre con gran amor.
Eres y serás un alma eterna.

—

Todos los días te recuerdo
y tu imagen aparece en mi mente,
tan maravillosa como siempre.
En este día tan especial
no podía más que felicitarte,
estés donde estés.

—

La distancia no nos ha separado
simplemente no podemos vernos con los ojos,
pero ahí estamos,
el uno junto al otro,
como siempre ha sido.

—

Ningún impedimento nos ha separado,
tampoco la muerte,
pues siempre te recuerdo
y tu imagen sigue viva en mi mente.
Tú estás ahí
y yo estoy aquí.

—

En este día inolvidable
como es el día de tu cumpleaños,
quiero desearte todo el amor que te mereces.
Si en donde estás los sueños todavía existen…
espero que consigas todos los que deseas,
aquellos con los que siempre has soñado.

—

Esta felicitación te la dedico a ti
con todo mi alma y mi corazón.
Nadie hay como tú,
nadie habrá como tú,
porque nadie eres tú.

—

Tus vivencias del pasado
son las que recuerdo con gran amor.
Ese amor que lo puede todo
y también hace que las cosas nunca mueran.

—

El cielo tiene una estrella más contigo,
siempre has sido un ejemplo para todos
y ahora nos iluminas desde lo alto.
Eres luz y eres amor,
eres alma y corazón.

—

El día de tu nacimiento es irrepetible
porque nunca un ser como tú nacerá,
por eso quiero felicitarte
y que recibas mis más sinceras bendiciones,
amor y felicidad.

—

Una vela encenderé para ti en este día,
para que tengas más luz
y siempre encuentres todos los caminos,
incluso los más oscuros.

—

Sé feliz desde donde te encuentres,
recuerda que ese es uno de mis sueños.
Yo rezaré por ti,
te incluiré en todas mis oraciones,
siempre.

—

El día que has nacido mi suerte ha cambiado
porque en mi camino te has cruzado.
El destino nos ha querido unir
y así ha sido,
ahora solo me queda pedirte que seas feliz.

—

No dejes de soñar nunca,
sigue amando como siempre,
pero descansa en tu corazón.
¡Feliz cumpleaños!
Y que lo que la muerte separe
no lo separe nuestros corazones.

—

Siempre te recordaré,
siempre estarás presente en mi,
a través de mis pensamientos
y de mis recuerdos,
siempre, siempre y siempre.

—

¡Feliz cumpleaños en tu día!
¡Sé feliz siempre!
Nadie se merece más dicha que tú,
ni más alegría que tu alma querida.
Te recordaré de por vida.